HORARIO DE SERVICIOS. SEDE: EL TEMPLO DEL CARMEN, BARRIO DEL HUESO. CAPILLAS: NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE. BARRIO DE LAS CRUCITAS; SAN JUAN PABLO II, EN LO MAS ALTO DEL CERRO DE LA MIRA, COLONIA JUAN N. ALVAREZ; BEATO BARTOLOME DIAS-LAUREL EN EL BARRIO DE EL POZO DE LA NACION.

sábado, 24 de diciembre de 2011

BENEDICTO XVI EN SU HOMILIA DE NAVIDAD 2011


En este momento en que el mundo está constantemente amenazado por la violencia en muchos lugares y de diversas maneras;
 en el que siempre hay de nuevo varas del opresor y túnicas ensangrentadas, clamemos al Señor:

 Tú, el Dios poderoso, has venido como niño y te has mostrado a nosotros como el que nos ama y mediante el cual el amor vencerá. Y nos has hecho comprender que, junto a ti,
 debemos ser constructores de paz.

 Amamos tu ser niño, tu no-violencia, pero sufrimos porque la violencia continúa en el mundo, y por eso también te rogamos:

Demuestra tu poder, ¡oh Dios!

 En este nuestro tiempo, en este mundo nuestro,
haz que las varas del opresor,
 las túnicas llenas de sangre y las botas estrepitosas de los soldados sean arrojadas al fuego,
de manera que tu paz venza en este mundo nuestro.

jueves, 22 de diciembre de 2011

FELIZ NAVIDAD 2011 - BUON NATALE 2011


¡Una feliz y santa Navidad 2011 para todos!
..."con el agobio que se cierne sobre nuestra ensangrentada nación"...


Juan Carlos Flores Rivas Pbro.

CANCION PARA EL NENETL JESUS.

Citlalin nos trajo en su luz
y en el trino del cenzontle tu advenimiento Jesús;
hago un portal de tezontle,
digo al huéhuetl que te anuncie
y con aromas de xóchitl te entrego mares y sierras,
mis volcanes y mis lagos… Llega mi nénetl Jesús.

Es Iztác dulce María
y José, Popocatéptl;
nuestro valle te acunó
escuinclito, nénetl Dios.

Los huejotes se elevan
y te miran llegar
la chinampa te acoge,
te perfuma el copal.

Mi maizal oro te da
y hay que espumar el chocólatl
trigueñito en mi sol
eres Tú Navidad.

Venadito,
duerme ya,
gocemos tu navidad.
Mi nénetl duerme, duerme…


NAVIDAD EN MÉXICO, Canción del nénetl Jesús.
Música: Samuel Máynez Prince.
Letra: Jorge Piñó Sandoval.
Voz recitante: Manuel Bernal.
Voz cantada: Salvador García.
Arreglos y coros: Rafael Carrión.
Organista: Tito Enríquez. Orquesta de la Unión Filarmónica Mexicana. Director: José de la Vega.
Grabación no comercial © SMP México, 1960.

La espléndida ejecución y el artículo explicativo puedes encontrarlo en
http://www.proceso.com.mx/?p=291823
¡No te lo pierdas!

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Cari amici, pace!


Vorremmo fare giungere a tutti voi i nostri migliori auguri per il Natale 2011. Che sia un momento di serenità, nonostante le difficoltà di questa fase storica.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

HACIA EL QUINCUAGESIMO ANIVERSARIO DEL INICIO DEL VATICANO II.



En el 50 aniversario de la convocatoria del concilio Vaticano II
Al acercarse el 50 aniversario de la convocatoria del Concilio Vaticano II por parte del Beato Juan XXIII (25 de diciembre de 1961), reproducimos un artículo de Mons. Fernando Ocáriz -Vicario General de la Prelatura del Opus Dei- publicado en el “Osservatore Romano” el pasado 2 de diciembre.

02 de diciembre de 2011
Fernando Ocáriz // L'Osservatore Romano
En el quincuagésimo aniversario de su convocación

SOBRE LA ADHESIÓN AL CONCILIO VATICANO II

El quincuagésimo aniversario, ya próximo, de la convocatoria del Concilio Vaticano II (25-XII-1961) es motivo de celebración, pero también de renovada reflexión sobre la recepción y aplicación de los documentos conciliares. Además de los aspectos directamente más prácticos de esta recepción y aplicación, con sus luces y sombras, parece oportuno recordar también la naturaleza de la debida adhesión intelectual a las enseñanzas del Concilio. Aún tratándose de doctrina bien conocida y de la que se dispone de abundante bibliografía, no es superfluo recordarla en sus rasgos esenciales, teniendo en cuenta la persistencia de perplejidades manifestadas, incluso en la opinión pública, en relación con la continuidad de algunas enseñanzas conciliares respecto a las precedentes enseñanzas del Magisterio de la Iglesia.



Beato Juan XXIII, el Papa que convocó el Concilio Vaticano II.Ante todo no parece inútil recordar que la intención pastoral del Concilio no significa que éste no sea doctrinal. Las perspectivas pastorales de hecho se basan en la doctrina, como no podría ser de otro modo. Pero sobre todo es necesario recalcar que la doctrina se orienta a la salvación; su enseñanza es parte integrante de la pastoral. Además, en los documentos conciliares es obvio que existen muchas enseñanzas de naturaleza puramente doctrinal: sobre la Revelación divina, sobre la Iglesia, etcétera. Como escribió el beato Juan Pablo II, “con la ayuda de Dios, los padres conciliares, en cuatro años de trabajo, pudieron elaborar y ofrecer a toda la Iglesia un notable conjunto de exposiciones doctrinales y directrices pastorales” (Constitución Apostólica Fidei depositum, 11-X-1992, Introducción).

La debida adhesión al Magisterio

El Concilio Vaticano II no definió ningún dogma, en el sentido de que no propuso mediante acto definitivo ninguna doctrina. Sin embargo, el hecho de que un acto del Magisterio de la Iglesia no se ejerza mediante el carisma de la infalibilidad no significa que pueda considerarse “falible” en el sentido de que transmita una “doctrina provisional” o bien “opiniones autorizadas”. Toda expresión de Magisterio auténtico hay que recibirla como lo que verdaderamente es: una enseñanza dada por los Pastores que, en la sucesión apostólica, hablan con el “carisma de la verdad” (Dei Verbum, n. 8), “revestidos de la autoridad de Cristo” (Lumen gentium, n. 25), “a la luz del Espíritu Santo” (ibid.).

Este carisma, autoridad y luz ciertamente estuvieron presentes en el Concilio Vaticano II; negar esto a todo el episcopado cum Petro y sub Petro, reunido para enseñar a la Iglesia universal, sería negar algo de la esencia misma de la Iglesia (cfr. Congregación para la Doctrina de la Fe, Declaración Mysterium Ecclesiae, 24-VI-1973, nn. 2-5).

Naturalmente no todas las afirmaciones contenidas en los documentos conciliares tienen el mismo valor doctrinal y por lo tanto no todas requieren el mismo grado de adhesión. Los diversos grados de adhesión a las doctrinas propuestas por el Magisterio fueron recordados por el Vaticano II en el n. 25 de la Constitución Lumen gentium, y después sintetizados en los tres apartados añadidos al Símbolo niceoconstantinopolitano en la fórmula de la Professio fidei, publicada en 1989 por la Congregación para la Doctrina de la Fe con la aprobación de Juan Pablo II.

Las afirmaciones del Concilio Vaticano II que recuerdan verdades de fe requieren, obviamente, la adhesión de fe teologal, no porque hayan sido enseñadas por este Concilio, sino porque ya habían sido enseñadas infaliblemente como tales por la Iglesia, mediante un juicio solemne o mediante el Magisterio ordinario y universal. Así como requieren un asentimiento pleno y definitivo las otras doctrinas recordadas por el Vaticano II que ya habían sido propuestas con acto definitivo por precedentes intervenciones magisteriales.

Las demás enseñanzas doctrinales del Concilio requieren de los fieles el grado de adhesión denominado “religioso asentimiento de la voluntad y de la inteligencia”. Un asentimiento “religioso”, por lo tanto no fundado en motivaciones puramente racionales. Tal adhesión no se configura como un acto de fe, sino más bien de obediencia no sencillamente disciplinaria, mas enraizada en la confianza en la asistencia divina al Magisterio y, por ello, “en la lógica y bajo el impulso de la obediencia de la fe” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Instrucción Donum veritatis, 24-V-1990, n. 23). Esta obediencia al Magisterio de la Iglesia no constituye un límite puesto a la libertad; al contrario, es fuente de libertad. Las palabras de Cristo: “Quien a vosotros escucha, a mí me escucha” (Lc 10,16) se dirigen también a los sucesores de los Apóstoles; y escuchar a Cristo significa recibir en sí la verdad que hace libres (cfr. Jn 8,32).

En los documentos magisteriales puede haber también – como de hecho se hallan en el Concilio Vaticano II – elementos no propiamente doctrinales, de naturaleza más o menos circunstancial (descripciones del estado de las sociedades, sugerencias, exhortaciones, etc.). Tales elementos deben acogerse con respeto y gratitud, pero no requieren una adhesión intelectual en sentido propio (cfr. Instrucción Donum veritatis, nn. 24-31).

La interpretación de las enseñanzas



Portada de un periódico durante el Concilio.La unidad de la Iglesia y la unidad en la fe son inseparables, y esto comporta también la unidad del Magisterio de la Iglesia en todo tiempo en cuanto intérprete auténtico de la Revelación divina transmitida por la Sagrada Escritura y por la Tradición. Ello significa, entre otras cosas, que una característica esencial del Magisterio es su continuidad y homogeneidad en el tiempo. La continuidad no significa ausencia de desarrollo; la Iglesia, a lo largo de los siglos, progresa en el conocimiento, en la profundización y en la consiguiente enseñanza magisterial de la fe y moral católica.

En el Concilio Vaticano II hubo varias novedades de orden doctrinal: sobre la sacramentalidad del episcopado, sobre la colegialidad episcopal, sobre la libertad religiosa, etc. Si bien ante las novedades en materias relativas a la fe o a la moral no propuestas con acto definitivo es debido el religioso asentimiento de la voluntad y de la inteligencia, algunas de ellas fueron y siguen siendo objeto de controversias sobre su continuidad con el Magisterio precedente, o bien sobre su compatibilidad con la Tradición. Frente a las dificultades que pueden encontrarse para entender la continuidad de algunas enseñanzas conciliares con la Tradición, la actitud católica, teniendo en cuenta la unidad del Magisterio, es la de buscar una interpretación unitaria en la que los textos del Concilio Vaticano II y los documentos magisteriales precedentes se iluminen recíprocamente. No sólo hay que interpretar el Vaticano II a la luz de documentos magisteriales precedentes, sino que también algunos de éstos se comprenden mejor a la luz del Vaticano II. Ello no representa ninguna novedad en la historia de la Iglesia. Recuérdese, por ejemplo, que nociones importantes en la formulación de la fe trinitaria y cristológica (hypóstasis, ousía) empleadas en el Concilio I de Nicea se precisaron mucho en su significado por los Concilios posteriores.

La interpretación de las novedades enseñadas por el Vaticano II debe por ello rechazar, como dijo Benedicto XVI, la hermenéutica de la discontinuidad respecto a la Tradición, mientras que debe afirmar la hermenéutica de la reforma, de la renovación en la continuidad (Discurso, 22-XII-2005). Se trata de novedades en el sentido de que explicitan aspectos nuevos, hasta ese momento no formulados aún por el Magisterio, pero que no contradicen a nivel doctrinal los documentos magisteriales precedentes, si bien en algunos casos – por ejemplo, sobre la libertad religiosa – comporten también consecuencias muy distintas a nivel de las decisiones históricas sobre las aplicaciones jurídico-políticas, vistos los cambios en las condiciones históricas y sociales. Una interpretación auténtica de los textos conciliares puede realizarse sólo por el propio Magisterio de la Iglesia. Por ello en la labor teológica de interpretación de las partes que, en los textos conciliares, susciten interrogantes y parezcan presentar dificultades, es preciso sobre todo tener en cuenta el sentido según el cual las intervenciones magisteriales sucesivas hayan entendido tales partes. En cualquier caso, siguen siendo espacios legítimos de libertad teológica para explicar de uno u otro modo la no contradicción con la Tradición de algunas formulaciones presentes en los textos conciliares y, por ello, para explicar el significado mismo de algunas expresiones contenidas en esas partes.

Al respecto, no parece finalmente superfluo tener presente que ha pasado casi medio siglo desde la conclusión del Concilio Vaticano II, y que en estas décadas se han sucedido cuatro Romanos Pontífices en la cátedra de Pedro. Examinando el Magisterio de estos Papas y la correspondiente adhesión del Episcopado a él, una eventual situación de dificultad debería transformarse en serena y gozosa adhesión al Magisterio, intérprete auténtico de la doctrina de la fe. Esto debería ser posible y deseable aunque permanecieran aspectos racionalmente no comprendidos del todo, dejando abiertos en cualquier caso los legítimos espacios de libertad teológica para una labor de profundización siempre oportuna. Como ha escrito Benedicto XVI recientemente, “los contenidos esenciales que desde siglos constituyen el patrimonio de todos los creyentes tienen necesidad de ser confirmados, comprendidos y profundizados de manera siempre nueva, con el fin de dar un testimonio coherente en condiciones históricas distintas a las del pasado” (Motu propio Porta fidei, n. 4).

jueves, 1 de diciembre de 2011

FIESTAS GUADALUPANAS 2011 EN EL BARRIO DE LAS CRUCITAS



COMITÉ PRO FESTEJOS DEL BARRIO DE LAS CRUCITAS.
Roll de peregrinaciones en honor de la Sma. Virgen de Guadalupe.
Del 1 al 12 de diciembre de 2011.

Fecha
Día.
Familias Responsables (probables)
Hora salida/llegada
Celebración Eucarística.
1 diciembre
Jueves.
Cortés Gómez.
6:00 – 7:00 p.m.


2 diciembre
Viernes.
Nancy Benítez.
6:00 – 7:00 p.m.


3 diciembre
Sábado.
Teresa Hernández.
6:00 – 7:00 p.m.


4 diciembre
Domingo.
Fam. Ramírez.
6:00 – 7:00 p.m.


5 diciembre
Lunes.
Ma. Del Rocío Fonce.
6:00 – 7:00 p.m.


6 diciembre
Martes.
Fermín Molina
6:00 – 7:00 p.m.


7 diciembre
Miércoles.
Mayito.
6:00 – 7:00 p.m.


8 diciembre
Jueves.
Guadalupe Gutiérrez.
6:00 – 7:00 p.m.


9 diciembre
Viernes.
Mercado Las Crucitas y
Señora Elfega Ugarte.
6:00 – 7:00 p.m.

10 diciembre
Sábado.

6:00 – 7:00 p.m.


 11 diciembre
Domingo.
Fam. Mondragón y señora María Sedano.
6:00 – 7:00 p.m.

12 diciembre
Lunes.
No hay.
No hay



EFEMERIDES DICIEMBRE DE 2011

EFEMERIDES DICIEMBRE 2011.

1-12 Diciembre. SOLEMNES MAÑANITAS A LA SIEMPRE VIRGEN SANTA MARIA DE
GUADALUPE CON SANTA MISA. 5 A. M. CAPILLA DE LAS CRUCITAS.
6 P.M. EN EL TEMPLO PARROQUIAL.

8 Diciembre. Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María.

9 Diciembre. Fiesta de San Juan Diego Cuatlatoaxin.
Fiesta Patronal en la Capilla de la Colonia Juan N.
Alvarez,en el Cerro de La Mira, de esta jurisdicción
parroquial.
1993. Erección Canónica de la Capellanía del Beato Juan
Diego, y nombramiento del Primer Capellán Fray Alberto Nitz
OFM Conv. Los Padres Franciscanos Conventuales, al mismo
tiempo constituyen el Seminario Juan Diego, adjunto a la
misma Capilla, para la atención de vocaciones provenientes
del ámbito indígena de Xochistlahuaca y Tlacoachistlahuaca,
al cargo del Padre Nitz.

12 Diciembre. Solemnidad de Santa María de Guadalupe,Reina de México y
Emperatriz de América.
1958. Proclamación en Acapulco de Santa María de Guadalupe
como REINA DE LOS MARES, y colocación de una Imagen en el
Islote de La Yerbabuena, frente a la Isla de la Roqueta por el
Presbítero Jorge Parra Martínez.
1960 Bendición de la Imagen de la Virgen de Guadalupe en el
lugar donde hoy está su Santuario en el Fraccionamiento
Mozimba por el Primer Obispo de Acapulco, Monseñor José
Pilar Quezada Valdés, siendo Párroco del Carmen el Presbítero
Guillermo Olmedo Jaimes.

13 Diciembre. Memoria de Santa Lucía, virgen y mártir. Día de la Bahía de
Santa Lucía, en Acapulco. Conmemoración particular en la Plaza
Heroica Escuela Naval. Acto cívico-cultural-religioso.
1521. El Capitán Francisco Chico descubre la Bahía de Acapulco.

14 Diciembre. Memoria de San Juan de la Cruz, presbítero y doctor de la
Iglesia. Onomástico del P. Juan Carlos Flores Rivas.

22 Diciembre. 1815 Aniversario del fusilamiento del Generalísimo Don José
María Morelos y Pavón, Siervo de la Nación, en Ecatepec.

25 Diciembre. Natividad de Nuestro Señor Jesucristo.
10 P. M. MISA SOLEMNE EN EL TEMPLO PARROQUIAL

29 Diciembre. 1960. Nombramiento de Vicario Cooperador del Carmen del
Presbítero Inocente Gómez.

31 Diciembre. 7 P. M. VIGILIA DE ORACION DE FIN DE AÑO EN EL TEMPLO
PARROQUIAL.
10 P. M. SANTA MISA DE FIN DE AÑO.

lunes, 7 de noviembre de 2011

EFEMERIDES NOVIEMBRE 2011

EFEMERIDES NOVIEMBRE 2011.

1 Noviembre. Solemnidad de Todos los Santos.
2 Noviembre. Conmemoración de Todos los Fieles
Difuntos.
3 Noviembre. Memoria de San Martín de Porres.
4 Noviembre. Memoria de San Carlos Borromeo.
Onomástico de Monseñor CARLOS GARFIAS MERLOS, Arzobispo de Acapulco. Y del Presbítero Juan Carlos Flores Rivas.
1996. En el Seminario Juan Diego de la Colonia La Mira, fallece de un paro cardiaco, en los brazos de su Superior General, el reverendo Padre Fray Alberto Nitz, OFM Conv., siendo Rector del Seminario y Capellán.
12 Noviembre. Memoria del Martirio de San Margarito
Flores García. Sacerdote fusilado en 1927 en Tulimán, Gro. –cerca de la caseta Paso Morelos-, originario de Taxco de Alarcón
14 Noviembre. Fiesta de Todos los Santos de la Orden del
Carmelo. Misa de precepto Cofradía.
20 Noviembre. Domingo. Solemnidad de Nuestro Señor
Jesucristo, Rey del Universo.
Memoria del Beato Anacleto González Flores y Compañeros Mártires: Luis Padilla Gómez, Jorge y Ramón Vargas, Ezequiel y Salvador Huerta, Luis Magaña Servín, Miguel Gómez y José Sánchez; José Trinidad Rangel, Andrés Sola Molist, Leonardo Pérez Larios y Angel Darío Acosta Zurita.
CONMEMORACION DE LA REVOLUCION MEXICANA.
21 Noviembre. Memoria de la Presentación de la
Santísima Virgen María. Misa de precepto Cofradía.
1992, Bendición y Colocación de la Primera Piedra de la Capilla del Beato Juan Diego en la Colonia Juan N. Alvarez, en el Cerro de La Mira, Acapulco, Gro. por el Señor Cura Don Blandino Bárcenas Agatón, Párroco del Sagrario-Catedral, en el territorio de la parroquial del Carmen.
22 Noviembre. Memoria de San Pedro Esqueda, sacerdote
asesinado en Teocaltitlán, Jalisco.
23 Noviembre. Memoria del Beato Miguel Agustín Pro
Juárez, fusilado en 1927 en la Ciudad de México.
ANIVERSARIO DE LA ORDENACION PRESBITERAL DE MONSEÑOR CARLOS GARFIAS MERLOS.
26 Noviembre. Desposorios de la Santísima Virgen María
con el Señor San José. Misa de precepto Cofradía.

lunes, 17 de octubre de 2011

UNA BUENA NOTICIA: ¡REPARAMOS EL VITRAL ROTO EN EL CARMEN!




UNA BUENA NOTICIA: ¡REPARAMOS EL VITRAL ROTO EN LA IGLESIA DEL CARMEN!

No cabe duda de que la gracia de Dios se manifiesta copiosamente.

El pasado sábado 15 de Octubre de 2011, en la Memoria litúrgica de Santa Teresa de Jesús, solemnidad para el Carmelo, y mientras Acapulco estaba de fiesta por la Visita de las Reliquias del Beato Papa Juan Pablo II "Magno", en el Templo del Carmen tenía lugar la colocación de un nuevo vitral, sustituyendo el ventanal que desde hace 10 años había comenzado su destrucción.

Nuestros amigos vitralistas de la Ciudad de México, Vitrales Diego Corona, trabajaron con maestría para sustituir el vitral roto y colocaron un magnífico vitral representando el momento de gracia en el que Nuestra Señora la Virgen del Carmen entrega a San Simón Stock el Sacratísimo Escapulario, acontecimiento que sucedió un domingo 16 de julio de 1251.

El nuevo vitral, que se localiza de frente a la entrada de la Iglesia, domina ahora con sus vistosos colores el Templo Parroquial.

Este vitral, junto con el resplandor bendecido en el mes de septiembre, constituyen un homenaje de amor a Nuestra Madre Santísima del Carmelo, con motivo de los 50 años de la Fundación de la Cofradía del Sacratísimo Escapulario, que tuvo lugar en el mes pasado de Septiembre.

Agradecemos la colaboración de todos y les pedimos que no se cansen, pues nuestro Templo Parroquial que es el segundo construido en la ciudad y puerto de Acapulco, necesita muchas reparaciones, entre ellas los vitrales que ya están llegando al final de su vida útil.

¡Dios les pague a todos!

NOVENA EN HONOR AL BEATO PAPA JUAN PABLO II EN EL CERRO DE LA MIRA DE ACAPULCO, GRO.



NOVENA EN HONOR AL BEATO PAPA JUAN PABLO II EN EL CERRO DE LA MIRA, EN ACAPULCO, GRO.

Al Beato Papa Juan Pablo II le fue asignado como dia de su Memoria Litúrgica el 22 de Octubre, en atención que ese mismo día en 1978 Tomó Posesión como Sumo Pontífice.

Y Acapulco va a la vanguardia, al dedicar una Capilla en su honor, muy cerca del centro de la ciudad y puerto, dentro de la jurisdicción de la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, en lo alto del Cerro de La Mira, muy cerca de la Casa Episcopal San Juan Diego, donde vivió sus últimos años de vida el bien recordado Arzobispo de Acapulco Monseñor Rafael Bello Ruiz y donde entregó su alma al Creador. En esa misma Casa vive ahora el actual Arzobispo Monseñor Carlos Garfias Merlos.

En lo más alto del cerro, al pie de varias antenas de comunicación, la Capilla del Beato Papa Juan Pablo II está de fiesta, pues desde el Viernes 14 de Octubre, inició la novena de Misas para honrar a este Grande Papa. Los fieles de este lugar estan acudiendo puntualmente a las 7 P. M. a la Santa Misa, y con mucho gusto hacen un ambiente festivo compartiendo aguas frescas, pan y galletas al terminar la misma.

El sábado 22 después de la Santa Misa, igualmente tendrá lugar una alegre convivencia, como es costumbre festejar a los santos,y donde no faltarán los fuegos artificiales.

¿Te esperamos? ¡Participa con nosotros!
¿cómo llegar? cerca del zócalo,en el punto llamado "El Trópico" y tambíen del mercado central, de "El Portal de Belén" salen taxis colectivos, debes decirle que te lleven hasta el tanque de la CAPAMA, pasando el edificio de piedra. ¡Te esperamos!

jueves, 13 de octubre de 2011

EL SOL DETENDRA SU DESTRUCTOR AVANCE ANTE UNA VIRGEN DEL CARMEN, CORONADA REINA.



EL SOL DETENDRA SU DESTRUCTOR AVANCE ANTE UNA VIRGEN DEL CARMEN, CORONADA REINA. 

TOMADO DEL BLOG RELIGION EN LIBERTAD. 13 octubre 2011

Un día como hoy no debe pasar desapercibido. El 13 de octubre de 1917 el sol bailó ante miles de testigos. Y Portugal se estremeció. No en vano el 13 de octubre será recordado como el día del milagro del sol. Y así lo sintieron las portadas de periódicos portugueses de la época. Desde un primer momento la gente pedía un milagro para poder creer en las apariciones de Fátima. Y la pequeña Lucia así lo demandaba a la Señora, apenada de que ante mensaje tan grave de conversión solicitado por la misma Madre de Dios, pocos fueran los que creyeran. “Haga un milagro, para que todos crean”. “Sí, lo haré”. Y ese día fue el 13 de octubre. Y entonces bailó el sol, cambiando de colores, para después ante una atemorizadas multitud lanzarse en zigzag en caída libre sobre la tierra. Pero se detuvo, para alivio de todos, y nuevamente zigzagueando recuperó su posición original.

Tanto da cómo ocurrió aquello, en qué consistió el milagro. Lo milagroso no sólo rompe las reglas ordinarias, sino que las descabala. Ningún observatorio astronómico percibió alteración en el sol, ni las órbitas de los planetas se vieron afectadas. Pero una multitud inmensa de personas (de 70.000 a 100.000 según los medios) llegó empapada por la pertinaz lluvia de octubre (cuando en octubre llovía) y en cuestión de minutos el astro sol no sólo jugó con su vista sino que secó casi instantáneamente sus ropas. Espectáculo sorprendente debió ser. Hasta los masones que lo presenciaron no pudieron dejar de admirarse. Luego llegaría aquella psicología barata a la que se acude para explicar lo inexplicable: delirio colectivo. Tanto da. El milagro se hizo para fortalecer la fe. Y lo consiguió. Luego fue el boca a boca, la prensa, las tertulias de café. Y los testigos que no olvidarían nunca lo que vieron.


Pero hoy en Fátima luce el mismo sol que en Vila Nova do Ourem. Nada queda de aquello. El 13 de octubre sólo queda en nuestra memoria como recuerdo de una confirmación, de un asombroso epílogo para unas apariciones inigualables. Por eso hay ciertas cosas que desconciertan, más aún, que no parecen encajar.

Vayamos al año 1978. Un cardenal llamado Albino Luciani escribirá un artículo en el que glosará uno de sus encuentros con la vidente carmelita. Sor Lucia tiene prohibido publicar, hacer declaraciones, recibir visitas sin permiso. Pero los obispos y cardenales están exentos de esa prohibición y Luciani fruto de esa prerrogativa ha visitado a la vidente varias veces. Poco después de ser nombrado papa corre el rumor de que la vidente le confirmó en una de aquellas visitas que saldría él elegido papa. Su circulo familiar ha sido el culpable de expandir el rumor, pues no olvidarán cómo regresó tras una de aquellas visitas. Su silencio, su “no os puedo decir lo que me ha contado sor Lucia”, su “no me preguntéis sobre ello”, su gravedad, preocupación y silencio. Por ello, años después de todo aquello, sorprende el contenido de ese artículo en el que relata y glosa su último encuentro con sor Lucia.

“De las apariciones, sor Lucia no me ha hablado. Yo solo le he preguntado algunas cosas sobre la famosa danza del sol. Ella no la presenció. Setenta mil personas, durante diez minutos seguidos, el 13 de octubre de 1917, vieron como el sol cobraba distintos colores, rotaba sobre si mismo 3 veces y descendía velocísimamente sobre la tierra. Lucia, junto sus dos compañeros, veía al mismo tiempo el sol detenido, a la Sagrada Familia y luego, en cuadros sucesivos, a la Virgen Dolorosa y Virgen del Carmen.” 

Nada extraño, todo familiarmente narrado, al estilo literario del que gustaba Luciani. La misma naturalidad del encuentro, de los datos, de lo sucedido. Como si tal cosa. La naturalidad de la fe de la que darían cuenta sus cartas publicadas bajo el título de Ilustrísimos señores. Pero algo no cuadra. 

Luciani ha tenido conversaciones previas con la vidente. El contenido de aquellas conversaciones se desconoce. Pero es hecho constatado que Luciani ha venido de uno de aquellos encuentros profundamente afectado. Y en su última conversación ¿hablan sobre el milagro del sol? Bien, asumamos esa conversación como real. Si Luciani está interesado sobre ese concreto milagro él mismo reconocerá que no es sor Lucia el mejor testigo al que acudir. Sor Lucia no vio el milagro del sol. Ni ella ni sus primos. Nada podría decirle. Pero para Luciani hay algo más, algo que trae causa en el milagro, pero que le sobrepasa. 

Para Luciani el milagro del sol era un signo, un símbolo de algo más profundo. Y por ello, seguía diciendo Luciani en aquel escrito de 1978: “creo que es lícito referirse (con fe humana) al signo del 13 de octubre de 1917 testificado hasta por los incrédulos y los anticlericales.” Llamará al milagro signo, señal, porque para él “tras el signo, es oportuno tener en cuenta las cosas subrayadas por este signo.” 

“Mirad al sol”, gritó Lucia. Y el gritar y asombrarse de la gente fue todo uno. Porque aquel extraño milagro de entrada dejó secas, en cuestión de minutos, las empapadas ropas de una asustada multitud que creyó caer muerta ante tal hecho. Pero Lucia no quería que miraran un sol danzando, cosa que por otro lado ella no veía, sino a un discurrir de visiones. 

“Aparecieron, al lado del sol, San José con el Niño Jesús y Nuestra Señora del Rosario. Era la Sagrada Familia. La Virgen estaba vestida de blanco, con un manto azul. San José también estaba vestido de blanco y el Niño Jesús de rojo claro. San José bendijo a la multitud, haciendo tres veces la señal de la Cruz. El Niño Jesús hizo lo mismo.

Siguió la visión de Nuestra Señora de los Dolores y de Nuestro Señor agobiado de dolor en el camino del Calvario. Nuestro Señor hizo la señal de la Cruz para bendecir al pueblo. Nuestra Señora no tenía espada en el pecho. Lucía veía solamente la parte superior del cuerpo de Nuestro Señor. 

Finalmente apareció, en una visión gloriosa, Nuestra Señora del Carmen, coronada Reina del cielo y de la tierra, con el Niño Jesús en los brazos.” 

Luciani en aquel encuentro indagará con la vidente especialmente sobre las visiones y su significado, pero todo ello envuelto en un discurrir milagroso del sol que ocurre paralelamente, de modo que el signo del milagro, debe ser explicado a la luz de las visiones. En este sentido se ha querido ver en las visiones una confirmación: el 13 de octubre la Señora se presenta, dice finalmente su nombre: “Soy la Virgen del Rosario”, por lo que esas visiones descritas no hacen sino confirmar tal afirmación, pues ¿acaso no se asiste a un transcurrir de misterios del Rosario? Pero para Albino Luciani había algo más, un significado más profundo. Para Luciani el milagro del sol de Fátima alertaba contra la apostasía silenciosa, y recordaba cómo la oposición al rosario dentro de la misma Iglesia era símbolo de pérdida de fe de quienes debían conservarla y enseñarla a los otros. Más aún, el milagro del sol también alertaba de esa iglesia en autodemolición que parecía querer destruir la fe del pueblo, la fe de la misma Iglesia. 

Pero, sinceramente, ¿qué relación puede tener las visiones descritas por Lucia y las visiones percibidas por miles de testigos con la interpretación de Luciani? Aparentemente ninguna, y eso es lo que no encaja. 

Decíamos al principio que el 13 de octubre de 1917 ha pasada al recuerdo de los creyentes como el día del milagro. Simplemente. Pero resulta que para un cardenal, un cardenal que durará 33 días en el trono de Pedro, es el 13 de octubre un día fundamental para entender el mensaje de Fátima. ¿Por qué? 

La persecución oficial a los pastorcitos tuvo causa primera en unos secretos recibidos el 13 de julio. Días después los masones dan inicio a una serie de actuaciones tendentes a conocer el contenido de ese secreto y, cómo no lo consiguen, a desacreditar las apariciones. Pero el móvil de todo ello son unos secretos que se les escapan de las manos. Y no sólo a ellos, la misma persecución sufrirá sor Lucia en la Iglesia, años después, a causa de aquel contenido misterioso. El mismo Juan Pablo II deberá sufrir las burlas y desprecio de muchos por su amor a Fátima y su deseo de hacer de Fátima centro de su Pontificado. Pero hete aquí que el cardenal Luciani pasa de puntillas por sobre el secreto, en aquellos años todavía no revelado, y se centra en la curiosidad del milagro, olvidando el 13 de julio y las persecuciones, para centrarse en la danza del sol. Es más, para deducir de ahí que todo ello no es más que el signo de algo como la apostasía y la autodemolición. Algo parece no encajar. Parece faltar alguna pieza, hasta el punto de que o bien Luciani guardaba un as en la manga -sabía más de lo que decía y conocía más de lo que callaba- o bien el 13 de octubre exige una profundización. 

En cierto modo la primera opción es más atractiva, periodísticamente hablando. De modo que vendría a confirmar que Luciani había recibido de labios de sor Lucia información relevante, personal en cuanto a su futuro como Papa, y sobre el destino futuro de la Iglesia. Cierto que esta opción no es descartable. Y el mismo Bertone, tratando de negarlo, casi la confirma en su entrevista con De Carli. Pero, en mi opinión, la segundo opción es la relevante: el 13 de octubre encierra un significado que ha pasado desapercibido y que Lucinani vio con meridiana claridad. 

Hagamos un juego, un simple paralelismo entre lo que vieron los niños y lo que vieron los peregrinos aquel 13 de octubre. 

Lucia y sus primos ven en el centro del sol la primera imagen, la Sagrada Familia, y grita aquel mirad el sol, entendiendo que aquello lo pueden ver todos. Pero no, cuando la multitud mira al cielo, el sol emerge de entre las nubes con una intensísima luz que sin cegar empieza a bailar ante sus ojos, cambiando de tonalidades. La gente exulta, goza admirada. Son sentimientos afines a la imagen del Rosario que ven los niños: los misterios gozosos contemplados en la Sagrada Familia.

Posteriormente el gozo del Rosario da paso al dolor, a esos misterios de dolor, la Dolorosa, Cristo camino del Calvario, y paralelamente la multitud grita atemorizada con un sol que ha dejado de jugar, de danzar, y que ahora zigzagueando, parece precipitarse contra la tierra. El miedo fue evidente. Los gritos de terror lo recogerán los periódicos de la época dando más dramatismo a un relato que sorprendió a todo Portugal. 

Y finalmente, tras el dolor la gloria. Representado por la vuelta del sol a su posición original, para alivio de las multitudes en paralelo a la visión contemplada por los niños del triunfo de María, coronada como Reina de Cielo y tierra. Por otro lado, curiosa metáfora visual que recordará a esa promesa de María el 13 de julio anterior.

Pero Luciani ve clara la relación más allá del paralelismo. Percibe todo ello como signo, como signo en paralelo, como discurrir de actos que teniendo en Cristo y su vida el modelo, será extrapolable a la Iglesia y su acontecer. Porque, ¿acaso las visiones, mientras la multitud contemplaba el milagro, no son una sorprendente metáfora de los tiempos? 

El gozo de la presencia de Dios en el mundo, la Sagrada Familia, deviene en paralelo con la danza del sol, gozosa, exultante. Pero la ausencia de Dios, el pecado del mundo, el desprecio de Dios, el odio a Dios -¿no está acaso representado por una Dolorosa y un Cristo camino del Calvario?- parece venir ejemplificado con un sol en caída libre a la tierra que parece destrozar todo y aniquilar todo. Y de nuevo la visión, ante el sufrimiento de una multitud aterrada viendo el sol despeñarse, un Cristo sufriente, invisible a sus ojos, les bendice. Como desconcertante imagen de los tiempos futuros que verán la crueldad y el dolor de los hombres como nunca antes –el holocausto nazi, la barbarie de las guerras, el comunismo- ante un silencio de Dios que calla y permite.

El 13 de octubre, bajo este prisma, se descubre resumen del mensaje moral de Fátima: porque es el Rosario el única arma dada al mundo para evitar su ruina. Pero al mismo tiempo como lectura nítida de lo que pasa y de cuanto pasará: porque ese astro cayendo era para el mismo Luciani signo de una Iglesia en autodemolición, signo de una apostasía de consecuencias incalculables, porque la cuando la fe desaparece sólo cabe la destrucción de todo. 

Y cuando todo parece perdido, cuando sólo queda esperar el final con un sol aniquilador, de nuevo resonará la promesa de María ahora representada por la Virgen del Carmen coronada y triunfante. El sol detendrá su destructor avance ante una Virgen del Carmen, coronada Reina. 

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